Me lo paso bien con otras personas.
Son graciosas.
Me hacen sentir entendido,
y ver que poseen
problemas como los míos
me hace sentir acompañado
en este universo
en el que estamos siempre solos.
Pero hay veces en las que no quiero gente.
No quiero gente amigable
preguntándome por mi vida
con voz de interés
y entusiasmo
que me haga pasar un buen rato
donde compartamos perspectivas vitales
y calor humano.
Hoy no me apetece eso.
He comprado dos litros y medio
de cerveza
en el supermercado
y tengo la casa sola para mí
todo el fin de semana
y tengo ganas de emborracharme
y pasar tiempo conmigo mismo.
Esos chistes a solas
donde te ríes de tus propias ocurrencias
espontáneas
absurdas
y te preguntas de donde vendrá
todo lo que absurdamente
pasa por la cabeza
como un pensamiento .
Y yo que sé.
Escribir
pensar
masturbarme
salir a dar una vuelta
e investigar los alrededores
colándome en algún lado
o subiéndome a algún tejado.